Patricio Grez
Si, a pedido de su hijo Juanito, usted entra a un Mac Donalds con él. Y le paga al Mac Donalds $2,000 por una hamburguesa con bebidas y papas fritas para su hijo Juanito, usted está subsidiando a su hijo Juanito, le está regalando $2,000 para que Juanito los gaste en una hamburguesa con acompañamiento. ¿Esta claro?…Obvio me dirá usted…está clarísimo…¿a que viene un cuento tan fome y tan obvio?…paciencia…ya le explicaré.
Nadie con medio dedo de frente dirá que usted está subsidiando al Mac Donalds por el hecho de comprarle una hamburguesa a su hijo Juanito. Su hijo Juanito eligió ir al Mac Donalds y usted le dio en el gusto, y lo subsidió, le regaló las 2 lucas para su almuerzo. En otras ocasiones su hijo Juanito ha preferido ir al Pizza Hut, o al Lomitón, pero esta vez eligió el Mac Donalds. Igual está claro que el subsidiado es Juanito y no el Mac Donalds, ni el Pizza Hut ni el Lomitón.
Por eso ni el Mac Donalds es una Hamburguesería Particular Subvencionada, ni el Pizza Hut es una Pizzería Particular Subvencionada, ni el Lomitón es una Lomitería Particular Subvencionada, ni tampoco el Mac Donalds es una Haburgesería “Gratis”, ni el Pizza Hut es una Pizzería “Gratuita” ni…You get the Idea???? Mister Gonzalo Vial, I am talking to you.
El Mac Donalds vende hamburguesas. Si aparece en el mostrador Juanito, con dos lucas, el Mac Donalds se las recibe y a cambio le pasa la hamburguesa con acompañamientos, al Mac Donalds le importa un carajo que las dos lucas de Juanito sean un regalo de su papá, una subvención o subsidio de papito mono.
Exactamente lo mismo ocurre con los colegios particulares que venden sus servicios a los escolares subsidiados de Chile, es decir el 100% de los escolares. Estos colegios tienen sus costos para producir sus servicios educacionales y por eso necesitan cobrar por sus servicios. Los escolares reciben un regalo o subsidio de sus padres que son los que eligen el colegio y lo pagan. Los padres pagan con SUS fondos obtenidos de variadas fuentes como por ejemplo sus sueldos, o subvenciones escolares estatales u otras fuentes de ingresos.
Es por eso que no existen los Colegios Particulares Subvencionados ni los Colegios “Gratis”, ese lenguaje erróneo solo ha servido para enredar un tema clave y estaría bueno que alguna vez utilicemos el idioma de Miguel de Cervantes Saavedra con un poco más de rigurosidad y precisión. Si utilizáramos el lenguaje correcto, hace rato que las familias chilenas, más concientes de la realidad, estarían en pie de guerra por las intentonas liberticidas de la izquierda que quiere liquidar la libertad de educación.
Si utilizáramos el lenguaje correcto sería totalmente imposible que la izquierda intente “fortalecer a los liceos estatales” por la vía de discriminar contra las familias que prefieren diversos proyectos de educación particular otorgándoles un subsidio estatal menor.
Si utilizáramos el lenguaje correcto, sabríamos que el sistema de educación pública chileno está conformado por todos los establecimientos educacionales, tanto los de propiedad estatal como los de propiedad privada.
Si utilizáramos el lenguaje correcto ya tendríamos la mitad de la solución para la mayor parte de nuestros problemas, pues los entenderíamos mejor….creo yo.